sábado, 11 de octubre de 2008

Solos. JOP


4 comentarios:

Angeles dijo...

Si bien la soledad de la adolescencia puede ser Horrible, es una soledad que muchas veces ayuda a crecer, pero la otra, la soledad de Dios, resulta tan terrible, que por momentos tu fotografía la hace casi humana.

Besos (Hoy solo tengo besos desolados.)

AndyPeCas dijo...

Bueno, bueno, vemos que una mujer sola en una hilera de bancos hace pensar en una iglesia...Linda idea: me gusta la imagen de una iglesia sin Dios ni santos....
"y le hablo de esa amante inoportuna que se llama soledad"

SUSURU dijo...

este post y con ese título me trajo el recuerdo de dos películas españolas.
- "Solos en la Madrugada"
- "No es bueno que el hombre esté solo"

Y en la foto del recinto, no la asocio para nada como una iglesia o algo parecido. Me recuerda al Salón Dorado del ediicio de la Municipalidad de La Plata, en el que estuve presente para escuchar algún concierto.

Con respecto a la soledad, a veces pero sólo a veces, pienso que es una buena compañía.

besotes con olor a tierra mojada por la lluvia.

JoP dijo...

Iglesias, que no sos iglesias. Soledades de Dios que son soledades de siempre, porque Dios no existe, amantes consecuentes y palacios con sonoridades de concierto que anhelo reconocer llenas de sinfonías de Schubert, Hayden o Beetoven.
Soledad es, generalmente, una mala palabra que no debería ser tal. Tal vez porque nos enfrenta con lo mejor y lo peor de nosostros mismos, por eso mostramos ante ella tanto temor.

Y al muchacho de la primera foto acodado en una esquina de Buenos Aires, esperando a quién sabe quién, lo dejaron allí solito, solito...

Besos de corcheas y semifusas, de ecos y de amores anhelados para todos.