viernes, 19 de abril de 2013

Senectud

“- Los dos estamos heridos moralmente, pero me dijeron una vez que las cicatrices tenían un tejido mucho más fuerte y menos sensible al dolor que el que había antes de la herida. Posiblemente, las cicatrices del corazón hacen a éste más firme y más apto para resistir las penas de la existencia. Y a esto es lo que la gente llama hacerse persona mayor. Tu y yo, Ivonne, estamos, pues, en la senectud y tenemos mil años”

Mike Brown

3 comentarios:

Angeles dijo...

Cuanto me gusta….
En cuanto a las cicatrices, aun no las tengo cariño, no sé lo que el tiempo decidirá sobre mis afectos hacia ellas, pero soy consciente de que están ahí y de que forman una parte importantísima de mi como persona: muchas aun me escuecen, otras son como recordatorios de batallas a las que sobreviví: lo único que se cierto, es que ya no se distinguir donde empiezo yo y donde terminan mis cicatrices.
Un beso, nuevo, acabado de nacer sin una pizca de historia detrás, porque si, sin más….

Angeles dijo...

Por cierto, que sepa usted, que a estas horas de la madrugada y habiendo abusado notablemente del alcohol, distinguir los números y palabras exigidas, para publicar mi comentario, resulta una tarea harto difícil.

Un beso, (Escribí verso en un primer momento….tengo las cabeza medio loca…)

JoP dijo...

Y pienso que, en determinado momento de la vida uno ya no es más que un cúmulo de cosas amontonadas. Con suerte, sedimentadas en cierto orde,. Sólo con suerte.

Un beso bien desordenado.