sábado, 10 de noviembre de 2007

Rastros. JOP.

3 comentarios:

AndyPeCas dijo...

No soy constante en amores
por eso tan solo estoy,
mi carta me la he jugado
y si he perdido...pago y me voy.

Rebelde soy para el lazo
ni sus cadenas me echó el amor,
yo soy gorrión viajero
y el mundo entero fue mi ambición.
Igual que baldosa floja
salpico si alguien me pone el pie,

AndyPeCas dijo...

No soy constante en amores
por eso tan solo estoy,
mi carta me la he jugado
y si he perdido...pago y me voy.

Rebelde soy para el lazo
ni sus cadenas me echó el amor,
yo soy gorrión viajero
y el mundo entero fue mi ambición.
Igual que baldosa floja
salpico si alguien me pone el pie

Dicen que una imagen vale màs que mil palabras...Que se yo...Dicen tantas cosas....

Andy

Anónimo dijo...

En la vereda suelen quedar rastros de tantas cosas....por ejemplo: de una gran pelea, de huellas marcadas con unas zapatillas embarradas después de un chaparrón, de una borrachera que invita a sentarse allí y seguir cantando a la luz de la luna.
Una vereda de Buenos Aires puede ser amor y puede ser guerra, imagen de si sus baldosas están enteras o rotas, como el corazón de quienes la pisan.