martes, 23 de diciembre de 2014

Desdramatizar

El nuevo imperativo categórico...


Porque hay momentos en que se agotan las instancias y agotan los espacios remanidos.
Agotan las mismas cosas de siempre y agota
la trampa seductora de lo novedoso.
Agotan el peso y también la levedad.
Surge, entonces, el nuevo imperativo categórico.

miércoles, 13 de agosto de 2014

Ninphomaniac

"Love is blind. No, It's worse. It distorts something. It's something I never asked for."

Lars von Trier's Ninphomaniac.



viernes, 1 de agosto de 2014

Indecencia

"De no ser lo que era en esencia, un cristiano a la antigua, tal vez hubiera estado de acuerdo con Jeremiah de Saint-Amour en que la vejez era un estado indecente que debía impedirse a tiempo"

Gabriel García Márquez. El amor en los tiempos del cólera.

jueves, 8 de mayo de 2014

Etapas

Hacia los cinco años ya sabemos si sorteamos el autismo o la psicosis simbiótica. A los 25 estamos más o menos salvados de la esquizofrenia, pero no de la paranoia. Después vienen los aneurismas y finalmente los delirios sistematizados. Entonces, cada vez que uno cumple una década se va salvando de algo. Finalmente vienen las demencias involutivas, pero ya uno no se da cuenta, lo que en definitiva es una bendición. Cada etapa de la vida tiene su karma.

Silvia Bleichmar.

jueves, 24 de abril de 2014

Choosing Happiness

We have these friends who have been together for many years. Not everyone understands them. They are quite different from each other. One is a bit more outgoing by nature, the other much more introvert. But their life is nice. Quiet. Boring some might say. But they feel good with it. Until a few weeks ago one of them met someone else. A casual meeting that developed into friendship and then something more. Now our friend lives a double life. The quiet life with his partner, and the adventurous life with his lover. And it kills him. 


This situation is more common then one might think. It is even not restricted to gay couples only of course. But seeing this happening to close friends made me start to think about the concept of relationships and why we choose to spend our lives with someone. What is it that makes us decide to settle down and spend the rest of your time with that one person. Love you say. Sure there is that. But apparently it’s not exclusive. When we asked our friend what he was going to do he told us that he really doesn’t know. He never meant to develop such strong feeling for his lover, and he really doesn’t want to hurt his partner. He loves his boyfriend. And he is in love with his lover. People say loving someone and being in love with someone is not the same thing. Loving often comes later.  It’s more intense than being in love. But we often mistake one for the other. Just like we often mistake loving for feeling comfortable. Sometimes we are with someone for such a long time, we cannot imagine anything else. Sure love is involved, but it is also a feeling of comfort. Sometimes only discovered when another possibility of love announces itself. There was a time that norms and values dictated that when you marry, you marry for life. But our norms and values have shifted over time and things that were black and white are now often been seen in many shades of grey. And maybe that also goes for relationships. We have come to accept separations and divorces like things that are very normal now. What we have not yet accepted is that you can love more than one person at the same time. And maybe it is time. Because it’s not always a question of choosing which person to love, it is more a question of choosing happiness. For you and for them.


Text from Beautiful Mag

jueves, 17 de abril de 2014

El amor en los tiempos del cólera.

Nunca seré viejo -le dije entonces-. Ella lo interpretó como un propósito heroico de luchar sin cuartel contra los estragos del tiempo, pero él fue más explícito: tenía la determinación irrevocable de quitarse la vida a los sesenta años.



martes, 1 de abril de 2014

Diversidad Sexual vs Disidencia Sexual

"Pareciera que un antagonismo de clases comienza a evidenciarse entre la Diversidad Sexual y la Disidencia Sexual. Porque mientras ese conglomerado de banderita arcoíris sigue reafirmándose gracias a la burguesía homosexual, la Disidencia (nosotrxs) va tomando cada vez más una notoria complicidad con los feminismos radicales y el anarquismo. Mientras la Diversidad se articula condescendientemente con el oficialismo a través de demandas “conservadoras y neoliberales”, la Disidencia pone ojo crítico sobre demandas acalladas y supuestamente peligrosas. La Diversidad se arrodilla para ser incluida en la normativa heterosexual; la Disidencia, en cambio, por no arrodillarse es cada vez más excluida como una “corriente postmoderna inútil, antojadiza y peligrosa”. No queremos dejar de ser peligrosxs. La inclusión no nos interesa si se trata de normalizarse. Pero lo “inútil y antojadizo” sólo nos parece una facilista descripción que la Diversidad pronuncia sobre nosotrxs para, fascistamente, deslegitimar y acallar nuestra forma de hacer (micro)política. ¿Por qué? Fácil: los dirigentes de ese conglomerado multicolor son fieles empleados del mismo sistema que alguna vez los trató de enfermos, pero que hoy se revaloran debido a su nueva cara inofensiva, blanca y cristiana, funcionando como ejemplares cómplices de esa represiva normalización. Siempre verán como una amenaza toda emancipación sexual que intente cuestionar los valores tradicionales de una sociedad cristiana neoliberal: la familia y el “amor lícito”.

¿Por qué no podría ser el aborto una demanda importante para la política sexual contemporánea? ¿Por qué la prostitución sólo se consume pero no se discute en la Diversidad? ¿Cuál es la supuesta liberación sexual en una Diversidad que sólo se preocupa de hablar el mismo idioma que la clase dominante? ¿Por qué la burguesía gay se ha reapropiado esta fuerza política que en sus inicios fue contestataria y crítica con el sistema? ¿Es coincidencia que la homosexualidad sea revalorada en tiempos donde dirigentes partidistas y burgueses encabezan la Diversidad?..."

martes, 28 de enero de 2014


Vivir el desorden, habitar el caos domestico, desobedecer la salud, entregarme al daño de un devenir incompleto. Mis ojeras ya no son por falta de sueño; son parte de la estética del rostro en descuido, la belleza de la secuela, el daño de la desobediencia. El daño no es un dolor indeseado. Cuando el caos del cuerpo reconforta, el daño es la secuela de un placer poco convencional. La porfía ante un cuerpo saludable, la desnutrición como consecuencia de la resistencia siempre precaria, en desborde, lejos de la estabilidad masculina de una resistencia tradicional. Mis ojeras son la constante desorganización del tiempo biológico que alguna vez (des)aprendí en el colegio. Fuera del dramatismo humanista del cuidado del cuerpo, transitar en el descuido de la desobediencia. En el espacio -siempre reducido- domestico que habito, el caos de mis ganas sólo sabe habitarse en precariedad. Cuando esta resistencia deje de bordear siempre el daño, dejará de ser resistencia. El cuerpo cansado es la secuela de un deseo inconmensurable, de ese devenir periférico siempre amenazado por el deterioro, en constante fuga del centro solido.

desde:  Mi botadero

lunes, 13 de enero de 2014