"Los que dejan que los humillen por temor o facilismos perpetúan no sólo su propia humillación sino la de sus descendientes. No comprenden que mientras más se dobleguen más los doblegarán. Al contrario, aquellos que no aceptan que los humillen y que no entregan sus conciencias, aunque anden desnudos y tan sólo coman mendrugos de pan, son mucho más dignos que los que se visten de seda a expensas de sus conciencias."
Víctor Hugo. Los Miserables.